Con poco más de 1000 habitantes, la pequeña población de Å, en Noruega, ostenta el título del pueblo con el nombre más corto del mundo.
Å se encuentra en el municipio noruego de Moskenes, en el extremo meridional de las islas Lofoten, un archipiélago situado por encima del Círculo Polar Ártico y formado por unas 2000 islas bañadas por el mar de Noruega. Con semejante ubicación, es fácil imaginar porqué este pueblito de 1.000 habitantes, durante las temporadas más frías, quede prácticamente desierta.
Su nombre, la primera letra de nuestro alfabeto (aunque en español se pronuncia como la vocal “o”), paradójicamente, es la última letra del alfabeto noruego (después de la z, æ y la ø) y significa “lugar donde hay agua”.

En los últimos tiempos y debido a su particular denominación, en Å, el turismo se ha convertido en su principal fuente de ingresos. No obstante, la tradición pesquera del lugar sigue viva en los secaderos de pescado y contar con una fábrica de aceite de hígado de bacalao que data de 1850.
El lugar permite disfrutar de la naturaleza, el descanso y la visita a los dos museos de la localidad: el Museo Lofoten Stockfish (Lofoten Tørrfiskmuseum) en donde se muestra el proceso desde que el pescado es llevado a tierra hasta que finalmente se empaca y está listo para la exportación y el Museo del Pueblo Pesquero Noruego (Norsk Fiskeværsmuseum) que aborda la vida pesquera en Lofoten en los últimos 200 años.

Fuente: www.viajerosblog.com